Por Alfredo García Pimentel (periodista de CMES Radio Sagua)
Como nave
a punto de zozobrar se ha visto al Villa Clara de béisbol en su andar por la 52
Serie Nacional de la pelota cubana. Tan decepcionante ha sido el desempeño de
los Naranjas, que el conjunto más estable de la última década está hoy jugándose
la vida en cada salida al terreno.
En puerto
ajeno, los muchachos de Ramón Moré han vivido una catástrofe, con solo 5
derrotas en 21 desafíos y apenas una subserie ganada en 7 intentos. La crisis
incluye 3 barridas, con un calendario que, para colmo, les ha deparado más
juegos como visitadores que como anfitriones.
Ni Freddy
Asiel Álvarez ha escapado fuera del Sandino. Ahora, para salvar la honrilla
ante el Matanzas de Víctor Mesa tuvieron que combinarse Yasmany Hernández
Romero, el mejor abridor del staff en la Serie, Robelio Carrillo y Diosdani Castillo, el más
sobresaliente relevista (0,87 PCL, Líder), para llevarse la primera sonrisa
tras 8 derrotas consecutivas ante los Cocodrilos.
Por suerte,
otros vientos han soplado en casa, donde solo han tolerado 3 reveses en 6
subseries. Gracias a eso, con alineación mermada y todo, se mantienen en zona
de clasificación.
Para dormir
tranquilos de cara a la siguiente fase, solo les queda ganar. El final, contra
Sancti Spiritus y Santiago de Cuba, se pinta duro y urgen las victorias, porque
Pinar del Río, que marcha noveno, está al acecho de cualquier resbalón. Ellos
van más fácil, con cierre ante Camagüey y Mayabeque.
Recuperar
hombres claves en la alineación regular, como Andy Zamora, Yandy Canto o el
propio Ariel Pestano… y que rinda toda la plantilla, dentro y fuera del
Sandino, podrían ser las tablas de salvación de un equipo en constante amenaza
de zozobra.
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