Por Andy Luis Leal Cerdá y Francys Romero García
La noche
del jueves 10 de octubre en O.co Coliseum, Oakland, California JUSTIN VERLANDER
derrotó al béisbol. Y no solo al béisbol, Verlander te derrotó a ti, a mí, a
las dudas de Leyland y a los suspiros del GM Dave Dombrowski y a todos los que
vieron aquel partido.
Le
pitcheó a los Atléticos 8.0 con 10 K, obligando a 6 rollings (fáciles todos) y
a 8 elevados (ninguno difícil, excepto el de Vogt), con 111 mágicos pitcheos
(ninguno infame, ninguno desarticulado de la zona). La noche del jueves se
demostró otra cosa que salió del lado ciego e invisible de Justin Verlander, cuando
existe Verlander no existe nadie más, está solo él en su "beautiful
day" como dice Bono.