La
dirección del béisbol en Cuba
publicó la pasada semana la nómina preliminar de nuestro país al Tercer Clásico Mundial, y el equipo
sorprendió a todos los seguidores de este deporte dentro y fuera de la mayor de
las Antillas.
Pretendo en estas palabras analizar lo
sucedido con los jugadores de posición u ofensivos. En un próximo comentario
trataré acerca del área del pitcheo.
Jamás esperé la inclusión de algunos
peloteros y la ausencia de otros, entre ellos, Ariel Pestano. Arbitrariamente
el mejor receptor cubano de todos los tiempos no aparece en la selección. ¿Vamos
a improvisar ahora con Frank Camilo o Yulexis
La Rosa
como regulares?, es una interrogante que se realizaba un colega, y no creo que
sea el único.
Los grandes conocedores del béisbol siempre han
insistido en que la receptoría es un arte que necesita madurez, experiencia. Un
buen receptor siempre es atractivo y necesario aunque no sea una estrella a la
ofensiva, para tal papel existen muchos más en la alineación. Claro está,
cuando se llevan receptores aun evento debe existir un balance entre los
defensivos y los que impresionan con el madero.
Un receptor, en el más amplio concepto, es mucho más que tener un buen
brazo para evitar los robos en las bases por parte de los rivales. Los mejores
representantes de esta posición se han caracterizado por conocer al detalle las
debilidades de los bateadores contrarios, un arma fundamental para ayudar a los
lanzadores.
Pestano agrupa
todas esas cualidades y amen de jugar poco en la presente Serie Nacional, (solo
cuarenta y cinco veces al bate), promedia para 245, con dos jonrones y a la
defensa anda sin errores y un pasball, para average de 1000. ¿Entonces es la
defensa la razón?
Frank Camilo batea ligeramente más en este
momento, pero nada como para lucir y a la defensa arrastraba dos errores y dos
passball varios juegos atrás, y su promedio de cogidos robando no es comprable
con los de Pestano y Yulexis. ¿Entonces cual fue la excusa? En el caso de
Yulexis posee mejores números a la defensa que Frank Camilo, así que si el caos
llegó por cuando se llevan puestos los arreos, no tiene mucha lógica contar con
el de Industriales.
Inconcebible esta
decisión, y ojalá que no pese como ancla que lleve a pique al team Cuba. Esto
no demerita la inclusión de Eriel, que anda desbordado a la ofensiva.
Para más sorpresas,
solo se inscribieron seis jugadores de cuadro con un solo torpedero y un
antesalista. Otro terremoto…¿Quien jugaría la tercera base ante una lesión de
Yuliesky Gourriel o el campo corto ante una de Erisbel “El Grillo”
Arruebarruena?. (Tornados en las neuronas de muchos, cierto?
Sorpresiva también
la inclusión de Luis Felipe Rivera como inicialista y aunque el de la Isla de la Juventud ha estado excelente
en la lid cubana, no creo que se incluya definitivamente, pues la improvisación
no es para tanto y escasean los bateadores zurdos, por lo que debe contar
Alexander Malleta. (Y en secreto, yo me llevaría al Clásico al pinareño William
Saavedra, aunque sea derecho, creo que saben el porqué)
Valiente y controvertida la incorporación del
joven Andy Ibáñez, pero el pinero lo tiene todo para imponerse al más alto
nivel. Resulta que muchos saben que un evento como el Clásico no es el lugar para
montar un laboratorio. De todos modos, Ibáñez funciona como utility para la segunda base y el campo
corto.
En cuanto a los jardineros con cinco hombres
bastarían en este equipo, y resulta llamativa la inclusión de seis atletas. Todos
se lo merecen pero afectan el cuadro, y ninguno de ellos puede suplir el
probable hueco en la tercera base, pues para ello contaban en la anterior
preselección Yurisbel Gracial y Yasmany Tomás (para no volver a poner el dedo
como muchos colegas y reclamar a Michel Enríquez).
Esta área es la que
menos sorpresas aporta aunque nadie esperaba la inclusión del zurdo Yadiel
Hernández, muy bueno junto al ya establecido Guillermo Heredia, ambos de Matanzas. A Alexei
Bell, lo apoyo y ya conocemos la polémica que han levantado sus declaraciones y
las del manager Víctor Mesa.
Cepeda y Desapaigne
están más que sembrados, con probabilidades de alternarse la responsabilidad
del bateador designado. Mientras, a pesar de que me gusta su garra deportiva,
no creo que Rusney Castillo esté en la forma tope para asistir al Clásico, amén
de que funciona como hombre proa.
Lamentable, ya que se iza la bandera de los
resultados en este instante, la exclusión del camagüeyano Dayron Varona, quien
permanece de líder en bateo, por encima de los 400 y cuatro jonrones.
Esperemos a ver para donde sopla el viento
ahora, tal vez la improvisación de resultado, yo no lo creo… mucha leña se
puede sacar de este árbol, por ahora, descansemos y esperemos el magno evento
del béisbol. Yo, no creo que la nave cubana supere la segunda fase…
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